miércoles, 4 de marzo de 2009

CONCACAF Liga Campeones 2008 - 2009. Cuartos de Final, Partidos de Vuelta. Santos, el mejor club de esta fase, va con todo por el Mundial de Clubes

CONCACAF LIGA CAMPEONES 2008 - 2009
CUARTOS DE FINAL
JUEGOS DE VUELTA
MARZO 3 AL 5


. Atlante (México) 3 - Houston Dynamo (Estados Unidos) 0
Global: 4 - 1
A pesar de que previo al encuentro las fuerzas de ambos planteles parecían parejas, el Atlante se encargó de galopar sin jinete y lo dejó de manifiesto desde el primer tiempo, cuando al 35' ya iba ganando por 2-0.
En el segundo tiempo, Giancarlo Maldonado también se hizo presente con su gol al 89' y hubo algo de polémica por su celebración, aparentemente insultando al público con gritos y con movimientos de los brazos, ya que no ha sido el goleador de antaño y con esta anotación desquitó su coraje de cierta forma.
Aunque la toma en tv sólo lo enfoca a él, y no a quién está observando o dirigiéndose, Maldonado dice que luego los medios de comunicación dicen cosas que no son y desvirtúan lo que ven. ¿Será?

. Marathon (Honduras) 0 - Islanders (Puerto Rico) 1
Global: 1-3
En esta ocasión, el equipo de Marathón fue incapaz de hacer efectiva su condición de local, y el Islanders, el equipo sorpresivo en esta edición de la Concacaf Liga Campeones, le ganó por la mínima diferencia para acceder así a las semifinales y luchar por el boleto al Mundial de Clubes que, a partir de este año, regresa al medio oriente, en una de las tantas naciones árabes que hay por la zona.

. Pumas 0 - Cruz Azul 1
Global: 0-2

Si Pumas estuvo pésimo en el partido de ida, en este de vuelta jugó igual o peor. Nuevamente el Tuca Ferreti prescindió de la presencia Palencia, quien le había respondido muy bien en la ronda de grupos. Y volvió a meter a Juan Carlos Cacho que no hizo nada y pasó prácticamente inadvertido.
Pelotazos, 'pases' y centros que iban hacia nadie, de lo mal tirados que estaban fue lo que hizo de Pumas, un débil y pobre reflejo de sí mismo, de lo que fue en la ronda de grupos.
Cruz Azul hizo lo suyo y nuevamente confirmó el dominio histórico de varios años que tiene sobre el club felino. Las más y mejores llegadas fueron de la Máquina que jugó con titulares, mientras que el 'Tuca' Ferreti no pudo encontrar la combinación ganadora entre jóvenes y titulares que pudiera servirle, siquiera para hacer buenas llegadas ofensivas.
El primer tiempo pasó sin goles y sin muchas emociones.
Pero durante el segundo tiempo, poco a poco Cruz Azul se fue adueñando de la media cancha rival y sus llegadas se hicieron constantes, y pudiera decirse que Pumas se defendió en forma decente de cierta manera, ya que sólo cayó un gol en contra hasta el 85' y fue por conducto de Christian Riveros. Pero el minuto en que se dio y de acuerdo a las circunstancias, ya hacían imposible una remontada por parte del equipo de C.U.
Terminó el partido, y aunque mucha afición estuvo alentando durante todo el juego, al silbatazo final pudo escucharse un abucheo general repudiando las pobre, pobrísimas ganas de triunfar de Pumas... y tenían toda la razón del tamaño del estadio de C.U.

Santos (México) 5 - Impact de Montreal (Canadá) 2
Global: 5-4

Y se hizo la hombrada. El equipo del Santos Laguna ha venido de menos a más en este año durante los dos torneos en los que tiene participación, que son la Concacaf Liga Campeones y el Clausura 2009 del futbol mexicano.
El representativo de la Comarca Lagunera comenzó el partido de vuelta anotando un gol, lo cual abría las esperanzas de poder remontar el marcador de 2-0 que se tenía en contra desde el primer partido; sin embargo, luego vendrían dos anotaciones del Impact. La primera en un error de Juan Pablo Rodríguez, regalo que aprovechó Robert Brown y que complicaba aún más las cosas, porque el Impact ya anotaba de visitante, algo que no pudo hacer Santos. Al 37' fue cuando el asunto se puso casi imposible, ya que el plantel canadiense ya ponía el marcador 2-1, 4-1 en el global, y con estos números se fueron al descanso.
Ya en el segundo tiempo, el club lagunero se fue con todo al ataque, todavía más que en el primer tiempo, ya que era la única manera de conseguir el triunfo, jugando con todo, sudando la camiseta a más no poder, desquitando el sueldo, respondiéndole al lleno que hizo la afición en el Corona, así como por el respeto, orgullo y tradición de las grandes remontadas en la historia del Santos. Por todo eso, la oleada verde lanzó su ímpetu a la media cancha contraria, contestada apenas por una que otra jugada de los visitantes, que viendo tal magnitud de poderío, no tuvieron más que replegarse y aguantar todas las llegadas del club local, que fueron muchas, y de ellas, algunas debían terminar en gol... y así fue en cuatro ocasiones. Vuoso fue el encargado de hacer en primer lugar su doblete con goles a los minutos 53 y 73. La hazaña estaba muy cerca. Santos seguía con sus embates. Y ya en el minuto 90, Carlos Darwin Quintero estaba a punto de hacer también su doble. Faltaba un gol. De inmediato llevaron el balón a la cancha. Si los jugadores santistas habían corrido los 90 minutos, qué importaban unos minutos más. Era jugársela o jugársela. Y así fue. Ya en tiempo de compensación, todavía dejaron de marcarle un claro penal al Santos y después... el éxtasis, el apoteósico gol del gane que también llegó por conducto de Quinteros. Parecía el campeonato, la banca se vació y se invadió la cancha aún sin terminar el juego. El Corona retumbaba de entusiasmo triunfador hasta el límite. No había más que hacer. Si el Impact estuvo prácticamente a la defensiva durante el segundo tiempo, no iba a cambiar su juego en un minuto. Estuvieron aguantando los goles, más que nada por el amontonamiento de jugadores de ambos bandos frente a la portería del Impact. Pero Santos tenía que buscar la suerte, desequilibrar la defensiva rival, abrir los espacios que parecían imposibles. Y cuando así había los huecos necesarios, cayeron los goles, se calló el Impact, y el mítico estadio Corona celebraba a todo lo que daba, a todo pulmón, con toda la emoción, porque Santos, el equipo, volvió a hacer su hazaña como uno sólo.
Si hay un equipo de los actuales semifinalistas que debe ir al Mundial de Clubes, ese es Santos Laguna, que tiene fuerza, carácter y coraje de equipo para lograrlo; pero debe seguir demostrándolo y ganarse ese lugar, ese boleto que es único, no compartido e intransferible.

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